miércoles, 28 de febrero de 2018

Como si supiéramos de Black Panther

Ya hemos acudido a nuestra cita con Black Panther (o Rabiosa, como nos gusta llamarle) y venimos con la tarea hecha para compartirles nuestras impresiones:


¿Cómo nos presentan a este integrante del Universo Cinematográfico de Marvel?

Partiendo de la reflexión de que no sabemos cuánto de necesaria era un entrega para descubrirnos la historia del príncipe, ahora rey, T’Challa y sus aventuras como Black Panther, aquí está, con sus luces y sus sombras. Nos plantean un argumento que sigue la línea de las películas de Capitán América, es decir, una trama basada en espionaje con una esfera política muy presente, todo un acierto. Eso sí, esta vez se proyecta todo desde una perspectiva más solemne, pretendiendo dar importancia al mensaje reivindicativo y restando consideración al mero entretenimiento.

El guión peca de repetitivo y de muy previsible, se reutiliza el recurso del combate ceremonial por el trono, y el encuentro con los predecesores en el plano astral era evitable una segunda vez. Además, en esta ocasión el humor no está tan bien hilado como en otras de las producciones de la franquicia, rompe el ritmo en algunos momentos.




Háblennos de T’Challa y de todos sus acompañantes, ¿cuál es la valoración?

Empezando por el prota, les diremos que la interpretación de Chadwick Boseman es insulsa, no transmite absolutamente nada, empatizar con su personaje se hace prácticamente imposible. Sin embargo, pasa justo lo contrario con su antagonista, a manos de Michael B. Jordan, a ratos sentimos ganas de que sea éste el vencedor de la disputa, ya que sus motivaciones, por momentos, parecen hasta más coherentes. Andy Serkis como Ulysses Klaue también hace un buen papel, tan carismático como breve.

Por suerte, los personajes secundarios y femeninos son muy potentes y tienen una muy admirable interpretación: Nakia por Lupita Nyong’o, Shuri por Letitia Wright, Ramonda por Angela Basset y Okoye por Danai Gurira.


¿El despliegue técnico está a la altura esta vez?

A pesar de que Marvel nos tiene acostumbrados a CGI de alta calidad, han pegado un derrape importante en este aspecto. Para los estándares del estudio, Black Panther tiene unos efectos mediocres, mareantes, con planos confusos en muchas de las peleas, de tal forma que terminas por perderte. En las escenas nocturnas y las distancias cortas apenas se veía nada y el enfrentamiento final entre Black Panther y Killmonger parece un videojuego en según qué planos.

Como ya les decíamos, han dejado un poco de lado el jolgorio para darle profundidad al asunto, y la acción queda bastante flojita comparada con otros de los films del universo. Mención especial a lo cutre y a la par hortera del cielo de auroras boreales del plano astral, sin comentarios.

En cuanto a ambientación y caracterización, ¿qué nos pueden contar?

En nuestra opinión, es el aspecto más cuidado de todos. Hay una cantidad absurda (en el buen sentido) de trajes, maquillajes y adornos diferentes e identificativos para cada individuo, caracterizándolos así como parte de una tribu concreta o escalón jerárquico dentro de Wakanda. Es una maravilla de colores y estilos que ponen en evidencia una de las herramientas que mejor ha utilizado Marvel a la hora de crear su universo: la atención al detalle. Quizás sea la entrega en este mundo de superhéroes con mejor y más original identidad visual. Mención aparte para el traje de Black Panther, de lo mejor hasta la fecha.


Se ha hablado mucho de la BSO de Black Panther, ¿qué opinan?

Sin duda, una de las mejores bandas sonoras que nos ha dejado Marvel. Bajo la batuta de Kendrick Lamar, va de lo espiritual a lo urbano, acompañando de forma espectacular a la narrativa y otorgando identidad a cada una de las escenas.

¿Cómo se entrelaza la historia de T’ Challa en el enjambre marveliano?

Conviene haber visto, al menos, Civil War antes de ver Black Panther, ya que la introducción de este personaje se realiza ahí y no aquí, y la mayoría de guiños apuntan a dicha cinta. Al margen de eso, la película está bastante encapsulada en sí misma, se apuesta por una historia independiente que no abre demasiados canales con el resto de sus compañeras de universo ni avanza ninguna trama compartida al margen de lo que se puede ver en las ya clásicas escenas post-créditos. Hay dos, por cierto.

Entonces, ¿en qué queda la cosa?

Esta propuesta de Marvel viene con aspectos muy firmes y otros que dan bajón. Lo mejor, una ambientación brutal, y un villano bien construido con el que logramos entendernos. Lo peor, un protagonista soso y el descuido de cuestiones tan representativas de este género como es el ritmo de la aventura y los efectos especiales.

Vamos a vestir a Black Panther con una falda vaquera, creemos que le irá bien.




Aquí verán nuestro sistema de puntuación faldil para que puedan comprender nuestra jerga. No duden en compartirnos sus opiniones al respecto en los comentarios o en cualquiera de nuestras redes sociales.

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